David López | 707 palabras | 5-6 min
Como contaba en el resumen del post, el 12 de Octubre sale a la venta la propuesta de Sony en relación a la realidad virtual con su casco Playstation VR, un dispositivo para la PS4 y PS4 PRO que te permitirá jugar a los juegos exclusivos de realidad Virtual que saquen para Sony. ¡Ojo! ¡No podrás jugar con tus Playstation VR en PC o con los juegos VR de Steam! Así que creo que es más que conveniente advertir sobre la compra de unas gafas de realidad virtual e informar de sus grandes fallos.
Voy a empezar por lo primero que llama la atención en cuanto comienzas a interesarte por la realidad virtual y sus dispositivos que necesitas para disfrutar de esta experiencia. ¡Lo que necesitas es una verdadera fortuna!
En su momento cuando estaba en desarrollo Oculus Rift, hace ya unos años, comentaban que el casco de realidad virtual en ningún caso superaría los 300 euros. Sin embargo finalmente el coste del dispositivo cuesta, según Amazon, Oculus y Htc Vive cuestan entre 800 y 900 euros cada uno. ¿Estamos locos? Porque además si continúas informándote sobre el tema descubres que deberás tener un equipo informático potente para que los juegos o experiencias corran a 60 frames por segundo o 60 fps a una resolución concreta.
Los videojuegos que han salido y saldrán con soporte de realidad virtual, independientemente del dispositivo (Playstation VR, Oculus o HTC Vive), no pasan más allá de meras curiosidades y experiencias. No son juegos innovadores que se basen en nuevas mecánicas que hayan surgido con el uso de estos cascos de realidad virtual, sino que son solo experiencias muy inmersivas que con suerte te durarán media hora, una hora o poco más.
Esas experiencias y duración lo acepto como una opción dentro de un gran catálogo. El problema radica en que no hay muchas propuestas de juegos contundentes o llamados triple A en el que sepas que vas a tener que dedicar 10, 15 o 20 horas para pasártelo. Por lo tanto como experiencia ya contamos con muchas posibilidades con los videojuegos indie que este año nos han llegado piezas como Inside, Firewatch, Virginia o Wheels of Aurelia, entre muchos otros. Como experiencias novedosas tuvimos en su momento los videojuegos de Nintendo DS, los juegos de Wii y me repito de nuevo, cientos de juegos innovadores en la escena indie. No necesitamos adquirir un casco de realidad virtual para poder disfrutar de nuevas experiencias jugando.
Por supuesto hay otras pegas que no son para ignorarlas, hay que tenerlas en mente antes de adquirir un dispositivo tan caro, estas son:
En realidad, estos dispositivos según lo veo yo, enriquecerán y quizás mejorarán la experiencia, la inmersión y las sensaciones de algunos tipos de juegos concretos que ya existen. En ningún caso va inventar nuevos géneros o formas de jugar, solo llegarán a ser un añadido. También creo que la realidad virtual aún está muy verde y mientras suena como una tecnología orientada al entretenimiento interactivo, resulta que tengo mis dudas sobre que ese campo sea el más indicado o potenciador para la realidad virtual... Ya lo veremos en 5 años.
Pues mira, pensándolo bien, si el dispositivo costase de 100 a 200 euros entendería su llegada e incluso me sentiría muy tentado a adquirir unas gafas de realidad virtual por la novedad, las he probado en ferias y no está mal. No obstante, las cosas no pintan así. Finalmente el alto precio que lo sitúa como un artículo de lujo y que a nivel jugable no invente nada, ni revolucione la industria, tengo que admitir que me decepciona mucho y me hace seguir con mi 3DS, Wii y Steam, sin demasiadas esperanzas para la realidad virtual en un futuro.
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