David López | 631 palabras | 4-5 min
En mi intento de innovar un poco en Instagram dentro del campo de la ilustración, me dedico durante este verano a realizar ilustraciones de escenas o de un paisaje, teniendo siempre presente que quiero contar una historia. ¿Cómo lo hago y qué pasos llevo a cabo?
Son aquellas ilustraciones de paisajes o estampas que lucen bonitas y además siempre hay alguna persona que junto a los elementos que se muestran en la ilustración permite entrever que no es solo una ilustración llamativa sino que existe una historia detrás.
Para explicar mejor este tipo de ilustración voy trabajar con un ejemplo de mi ilustración, es decir, la ilustración: Fuji donde vemos una chica rubia que vive en una casa en la playa y que por el paisaje podemos imaginar que vive en japón (al ver un torii y el monte fuji):
El proceso o los primeros pasos que hay que seguir son semejantes a otro tipo de trabajos artísticos. La gran mayoría siguen el siguiente guión:
En ilustración de paisajes o escenarios he descubierto que lo más importante son los detalles. El boceto o bosquejo principal se suele tardar muy poco en llevarse a cabo, pero cuando abres Adobe Illustrator o el software de edición de gráficos y te sientas a digitalizar la ilustración y comenzar a detallarlo todo, es aquí donde puedes pasarte un día entero o incluso hasta dos o tres días cuidando los detalles para que todo quede bonito y creíble.
Como un buen escritor cada elemento que incluyes en la ilustración debe contar algo y debe de hacerlo bien del escenario o bien de la historia o trasfondo que hay detrás del protagonista de la ilustración. Para mi este principio es la regla de oro que hay que tratar de romper lo menos posible para mantener cierta coherencia en la historia que cuenta la ilustración.
Una vez terminada la ilustración, lo siguiente que hayo yo es crear un mini corto de la misma donde normalmente tomo como protagonista a la persona que aparece en la ilustración y voy escribiendo pensamientos suyos sobre su situación, problemas, cosas que la hacen feliz, preocupaciones, tratando siempre de terminar con un toque de humor irónico o con una resolución fuerte del tema tratado.
El sencillo vídeo que aporto no es realmente necesario ya que lo ideal es que la ilustración hable por si misma. Sin embargo, a mi me viene bien este tipo de ejercicio en el que voy mejorando poco a poco. En un futuro añadiré música y quizás hasta voces.
Me gusta mucho crear pequeñas historias que cuenten algo, y provoquen algún tipo de sentimiento, nada trascendental sino más bien una sonrisa o haga pensar durante el breve minuto que dure el vídeo o la contemplación de la ilustración.
En el caso del sencillo mini corto creado con la ilustración, me viene genial para investigar sobre cómo expresar las ideas en inglés, y me encanta contar con la limitación de una sola escena para crear un mini corto sacando todo el partido posible a la obra. En ese sentido por eso es tan importante detallar la ilustración.
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